Monday, August 10, 2009

Ahora que ya tus ojos son como sal

Ahora que ya tus ojos son como sal, y fértil
tu inmensa boca es un volcán difunto.

Ahora que ya los lobos y las piedras,
tus vestidos pegados cual olvidadas vendas

y este atroz mineral que extraje de tu pecho,
son reliquias tan ciertas como antiguos abrazos.

Ahora que tus axilas pueblan de olor el mundo
donde yo con mi piel de viudo te presiento.

Ahora que tus zapatos, tus sostenes, tu lápiz de labios,
no me dan más que frío al encontrarlos.

Ahora que ya no puedo dormir donde has dormido
porque mis ojos lloran azufre y yodo ardiendo.

Ahora que ya no puedo ver tu talla desnuda
porque alambres al rojo se clavan en mi sexo.

Ahora que los domingos salgo sin rumbo, inmóvil.
y que tranvías, yeguas, las moradas mujeres ni el consuelo,
han de torcer mi ruta de novio eternamente.

Ahora que ya conozco lo bastante a los hombres,
para que no me fíe ni de mi pena misma.

Ahora que los difuntos, en montones austeros,
son incapaces de hacerme verter lágrimas
porque mis ojos son de cristal y aluminio.

Ahora que ya me olvido de qué es dormir tranquilo,
e imbéciles amigos pueblan mi soledad de compasiones que no quiero.

Ahora que mis dos manos son totalmente inútiles
porque en clavos con óxido sólo encuentran tu cuerpo.

Ahora que ya mi boca pudiera cerrarse eternamente,
porque tus salobres ingles, tus sustanciosos huesos,
ya ni me pertenecen.

Ahora que ni cuchillos, ni pistolas, ni ojos envenenados,
me hacen temblar de miedo, porque un solo veneno
es quien late en mis pulsos.

Tuesday, July 14, 2009

El cielo está aquí

Tú y yo nunca estaremos separados
Es solo una ilusión
forjada por las mágicas lentes de la percepción
Solo existe una integridad
un pensamiento
Somos como los rizos
en el vasto océano de la conciencia
-
Ven, vamos a bailar
el baile de la creación
Vamos a celebrar
la alegría de la vida
Los pájaros, las abejas
las galaxias infinitas
ríos, montañas nubes y valles
son todo un ejemplo palpitante
viviendo, respirando
vivos con la energía cósmica
Lleno de vida, de alegría
este universo es mío
-
No tengo miedo
de conocer quién eres tú
Eres mucho más de lo que jamás imaginaste.
Eres el sol
eres la luna
eres la flor silvestre floreciendo
eres la vida pulsante
que late, baila
desde una partícula de polvo
hasta la más lejana estrella

Tú y yo nunca estaremos separados
es tan solo una ilusión
forjada por las mágicas lentes de la percepción
-
Vamos a celebrar
la alegría de la vida
Vamos a bailar
el baile de la creación
regresando a nosotros mismos
Nosotros creamos una y otra vez
círculos infinitos que vienen y van
Nosotros gozamos
en la infinidad del tiempo.
Nunca hubo un tiempo
en que yo no existiera y tú no existieras
Nunca habrá un tiempo
en que dejemos de ser
Infinitamente, ilimitadamente
en el océano de la conciencia
somos como rizos
en el mar del gozo
-
Tú y yo nunca estaremos separados
es tan solo una ilusión
forjada por las mágicas lentes de la percepción
El cielo está aquí
ahora es el momento de la eternidad
No te engañes a ti mismo
recobra tu felicidad
Una vez estuviste perdido
pero ahora estas en casa
en un universo vecinal
De aquí para allá
es el ilimitado océano de la conciencia
y nosotros somos como rizos
en el océano de la felicidad
-
Ven vamos a bailar
el baile de la creación
Vamos a celebrar
la alegría de la vida
Tú y yo nunca estaremos separados
es tan solo una ilusión
forjada por las mágicas lentes de la percepción
El cielo está aquí
ahora es el momento de la eternidad
No te engañes a ti mismo
y recobra tu gozo

Monday, July 13, 2009

Cuarentena

Con qué ferocidad y a qué hora importuna
salen tus veinte años de la fotografía
para exigirme cuentas.
En los ojos heridos por la luz
sostienes la mirada de mis sobras,
en el descaro de tus profecías
desdeñas la lealtad de mis recuerdos,
en la piel transparente
anegas el cansancio de mi piel
y defines mis años por traiciones.

No escandalices más,
hablemos si tú quieres,
elige tú las armas y el paisaje
de la conversación,
y espera a que se vayan
los invitados a la cena fría
de mis cuarenta años.
Por evaporaciones,
como las aguas sucias de los charcos
se acercan a las nubes,
caminaré contigo
hasta la plaza de tu juventud.
Allí están los magníficos
árboles de las ciencias y las letras
con sus palabras en el mes de mayo,
y el orden de los números
a la orilla del tiempo,
más cerca de las sumas que de las divisiones.

Imagino tu voz, supongo el aire
-porque a veces regresa hasta mis labios
en noches de espesura-
con el que afirmarás
que toda libertad es una roca,
que no faltan el viento y las razones,
sino la voluntad en el timón,
para gritar después que mi conciencia
es ya ropa tendida,
palabras puestas a secar.

Tendrás razón. No digo
ni la mitad de lo que siento.
Pero recuerda que mi soledad,
la que arde en mi lámpara de desaparecido,
es el silencio de las causas públicas.
Y puedes comprenderme:
mis mujeres dormidas,
el cajón de los barcos indefensos,
un teléfono antiguo...,
todas las tachaduras se parecen
a la inquietud que sufres
ante la vida en blanco.

Ya que fuerzas mis sombras con tu luz
comprende mi silencio en tus exclamaciones.
Porque sabes que sé
el lado frágil de la impertinencia,
lo que hay de imitación en tu seguridad,
la certeza que llega de los otros
para empujarte
por el afán de ser el elegido,
por el deseo de gustar,
hasta vivir de oídas en muchas ocasiones.

Aceptaré las quejas, si tú me reconoces
la legitimidad de la impostura.

Ahora que necesito
meditar lo que creo
en busca de un destino soportable,
me acerco a ti,
porque sabías meditar tus dudas.
Cuando tengas la edad que se avecina,
admitirás el tiempos de los encajadores,
la piel gastada y resistente,
el tono bajo de la voz
y el corazón cansado de elegir
sombras de pie o luz arrodillada.

Después de lo que he visto y lo que tú verás,
no es un mal resultado, te lo juro.
Baja conmigo al día,
ven hasta los paisajes verdaderos
en los que discutimos,
y me agradecerás
la difícil tarea de tu supervivencia.

Tuesday, May 19, 2009

Cerrar los ojos

Cerremos estos ojos para entrar al misterio
el que acude con gozos y desdichas
así
en esta noche provocada
crearemos por fin nuestras propias estrellas
y nuestra hermosa colección de sueños
el pobre mundo seguirá rodando
lejos de nuestros párpados caídos
habrá hurtos abusos fechorías
o sea el espantoso ritmo de las cosas
allá en la calle seguirán los mismos
escaparates de las tentaciones
ah pero nuestros ojos tapados piensan sienten
lo que no pensaron ni sintieron antes
si pasado mañana los abrimos
el corazón acaso de encabrite
así hasta que los párpados
se nos caigan de nuevo
y volvamos al pacto de lo oscuro

Friday, April 24, 2009

Cuidado con los que saben

Hay suficiente traición y odio, violencia,
necedad en el ser humano corriente
como para abastecer cualquier ejercito o cualquier
jornada.
Y los mejores asesinos son aquellos
que predican en su contra.
Y los que mejor odian son aquellos
que predican amor.
Y los que mejor luchan en la guerra
son -al final- aquellos que
predican
paz.
Aquellos que hablan de Dios
necesitan a Dios.
Aquellos que predican paz
no tienen paz.
Aquellos que predican amor
no tienen amor.
Cuidado con los predicadores,
cuidado con los que saben.
Cuidado con aquellos que están siempre
leyendo libros.
Cuidado con aquellos que detestan
la pobreza o están orgullosos de ella.
Cuidado con aquellos de alabanza rápida
pues necesitan que se les alabe a cambio.
Cuidado con aquellos que censuran con rapidez:
tienen miedo de lo que no conocen.
Cuidado con aquellos que buscan constantes
multitudes;
no son nada solos.
Cuidado con
el hombre corriente,
con la mujer corriente.
Cuidado con su amor.
Su amor es corriente, busca
lo corriente.
Pero es un genio al odiar,
es lo suficientemente genial
al odiar como para matarte, como para matar
a cualquiera.
Al no querer la soledad,
al no entender la soledad
intentarán destruir
cualquier cosa
que difiera
de lo suyo.
Al no ser capaces
de crear arte
no entenderán
el arte.
Considerarán su fracaso
como creadores
sólo como un fracaso
del mundo.
Al no ser capaces de amar plenamente
creerán que tu amor es
incompleto
y entonces te
odiarán.
Y su odio será perfecto
como un diamante resplandeciente,
como una navaja,
como una montaña,
como un tigre,
como cicuta.
Su mejor
arte.

Monday, April 06, 2009

Durante cuánto tiempo nos engañaron

Trasmutamos ahora,

nos apresuramos a huir

como huye la

naturaleza,

Somos la naturaleza,

durante mucho tiempo estuvimos lejos.

Pero ahora volvemos,

nos convertimos en plantas,

en troncos, en follaje,

raíces y cortezas.

Estamos asentados en la tierra,

somos peñascos,

pastamos,

somos dos en medio de la hacienda bravía,

tan espontáneos como los otros.

Somos dos peces que nadan juntos en el mar,

somos lo que son las flores del algarrobo,

derramamos fragancia

en los caminos de la mañana y de la tarde.

Somos también lo sucio de las bestias,

de las plantas, de los minerales.

Somos dos aves de rapiña,

nos elevamos en el aire y miramos la tierra.

Somos dos soles que deslumbran,

somos nosotros dos los que giramos,

cósmicos y estelares,

somos como dos cometas.

Merodeamos, cuadrúpedos y feroces, por la espesura,

y saltamos sobre la presa.

Somos dos nubes que se desplazan en lo alto

cuando amanece o atardece.

Somos dos mares que se unen,

somos esas olas felices que se revuelcan

y se juntan, mojándose.

Somos lo que es la atmósfera,

transparentes, hospitalarios,

permeables, impermeables.

Somos nieve, lluvia, frío, tinieblas,

somos lo que el planeta engendra y protege.

Hemos descrito círculos hasta volver los dos al hogar,

hemos renunciado a todo,

salvo a la libertad y a nuestra alegría.

Thursday, April 02, 2009

Antes que nosotros

Antes que nosotros por las mismas arboledas
pasaba el viento, cuando había viento,
y las hojas no se movían
de modo diferente al de hoy.

En vano nos agitamos y pasamos.
No hacemos más ruido en lo que existe
que las hojas de los árboles
o los pasos del viento.

Tratemos pues con abandono asiduo
de entregar nuestro esfuerzo a la Naturaleza
y no querer más vida
que la de los verdes árboles.

Inútilmente parecemos grandes.
Excepto nosotros, nada en el mundo
saluda nuestra grandeza
ni sin querer nos sirve.

Si aquí, junto al mar, mi huella en la arena
el mar con tres olas la borra,
¿Qué hará en la otra playa
donde el mar es el Tiempo?

Wednesday, April 01, 2009

Tengo miedo de verte

Tengo miedo de verte
necesidad de verte
esperanza de verte
desazones de verte

tengo ganas de hallarte
preocupación de hallarte
certidumbre de hallarte
pobres dudas de hallarte

tengo urgencia de oírte
alegría de oírte
buena suerte de oírte
y temores de oírte

o sea
resumiendo
estoy jodido
y radiante
quizá más lo primero
que lo segundo
y también
viceversa.

Monday, March 09, 2009

Aún

Amé. Es incomprensible como el temor de los árboles.
Ahora estoy extraviado en la luz pero yo sé que amé.
Yo vivía en un ser y su sangre se deslizaba por mis venas y
la música me envolvía y yo mismo era música.
Ahora,
¿quién es ciego en mis ojos?

Unas manos pasaban sobre mi rostro y envejecían dulcemente. ¿Qué
fue existir entre cuerdas y olvidos?
¿Quién fui en los brazos de mi madre, quién fui en mi propio corazón?

Es extraño: solamente he aprendido a desconocer y olvidar. Es extraño:
todavía el amor
habita en el olvido.

Wednesday, February 25, 2009

Opiario

Antes del opio mi alma está doliente.
Sentir la vida anima y debilita
y yo busco en el opio que consuela
un Oriente al oriente del Oriente.
Esta vida de a bordo ha de matarme.
Son días sólo de fiebre en la cabeza
y, por mucho que busque hasta enfermar,
no encuentro molde al que adaptarme.
En paradoja e incompetencia astral
vivo en surcos de oro mi vida,
ola donde el decoro es recaída,
los propios gozos, ganglios de mi mal.
Y por un mecanismo de desastres,
engranaje con rodamientos falsos,
camino entre visiones de caldasos
en un jardín en el aire pero con flores.
Me voy tambaleando entre la labor
de una vida interior de encaje y laca.
Siento que tengo en casa la navaja
con que fue degollado el Precursor.
Ando arrastrando en la maleta un crimen
que cometió un abuelo mío por exigente.
Tengo los nervios de punta, de veinte en veinte,
y caí en el opio como en una zanja.
Al toque de morfina adormecido
me pierdo en transparecias palpitantes
y en una noche llena de brillantes
se levanta la luna como mi destino.
Mal estudiante siempre fui, y ahora
no hago más que ver partir la nave
por el Canal de Suez y conducir
mi vida de alcanfor en la aurora.
Perdí días que antaño aprovechara.
trabajé para tener sólo el cansancio
que es hoy en mí una especie de brazo
que en el cuello me oprime y me ampara.
Y fui niño, como todo el mundo.
Nací en una provincia portuguesa
y ya he conocido gente inglesa
que dice que sé inglés perfectamente.
Me agradaba tener poemas y novelas
publicadas por Plon y en el Mercure
Mas imposible es que esta vida dure.
¡Si en este viaje ni hubo temporales!
La vida a bordo es una cosa triste,
aunque la gente se divierta a veces.
Hablo con alemanes, suecos e ingleses
pero mi pena de vivir persiste.
Creo que no vale la pena haber
ido al Oriente y visto la India y China.
La tierra es parecida y muy pequeña
y hay sólo una manera de vivir.
Por eso tomo opio. Es un remedio.
Soy un convaleciente del Momento.
vivo en la planta baja del pensamiento
y ver pasar la vida me da tedio.
Fumo. Me canso. ¡Ah, una tierra, al fin,
en donde muy al este no fuese el oeste ya!
¿Para qué fui a visitar la India que hay
si no existe la India, sino el alma en mí?
Soy desgraciado por mi beneficio.
Los gitanos me robaron la Suerte.
Quizá no encuentre, ni junto a la muerte
un lugar que me abrigue de mi frío.
Fingí haber estudiado ingeniería.
Viví en Escocia. Visité Irlanda.
Mi corazón es una abuelita que anda
limosneando a las puertas de la Alegría.
¡No llegues a Port-Said, nave de hierro!
Vira hacia la derecha, no sé a dónde.
Paso los días en el smoking-room con el conde
un escroc francés, conde de fin de entierro.
Vuelvo descontento a Europa, y con suerte
de poder ser un poeta quimérico.
Soy manárquico, pero no católico
y me agradaba ser alguna cosa fuerte.
Me gustaba tener creencias y dinero,
ser varia gente insípida que vi.
Hoy, después de todo, no soy sino, aquí,
en un navío cualquiera, un pasajero.
No tengo ninguna personalidad.
Más notable que yo es ese criado
de a bordo, con bello estilo alzado,
de lord escocés hace días en ayuno.
No puedo estar en ninguna parte. Mía
es la patria donde no estoy. Ando enfermo y flaco.
El comisario de a bordo es un bellaco.
Me vio con la sueca... y el resto lo adivina.
Un día monto un alboroto a bordo
sólo para que los demás hablen de mí.
No puedo con la vida y creo desastrosas
las iras con que a veces me desbordo.
Paso el día fumando, bebiendo cosas,
drogas americanas que entontecen,
¡y yo tan bebido ya sin nada! Si diesen
un mejor cerebro a mis nervios como rosas.
Escribo estas líneas. ¡Parece imposible
que, teniendo talento, apenas lo sienta!
El hecho es que esta vida es una quinta [casa de campo]
donde se aburre hasta un alma sensible.
Los ingleses están hechos para existir.
No hay más gente como ésta, tan presta
a la Tranquilidad. La gente echa
un centavo y les sirve para sonreír.
Pertenezco a un género de portugueses
que tras haber descubierto la India
están sin trabajo. La muerte es algo cierto.
He pensado en esto muchas veces.
¡Al diablo con la vida, la gente que la tenga!
Ni leo mi libro de cabecera.
Me fastidia el Oriente. Es una alfombra
que al enrollarse deja de ser bella.
Caigo en el opio por fuerza. Pero querer
que ponga en claro una vida de éstas
no se puede exigir. Almas honestas
con horas de dormir y de comer,
¡que un rayo las parta! Y esto, al fin, es envidia,
porque estos nervios son mi misma muerte.
¡No haber un navío que me transporte
donde no quiera nada que no vea!
¡Ah! Me cansaba de este mismo modo.
Quería un opio más fuerte para ir de allí
hacia sueños que diesen cuenta de mí
y rogasen conmigo en algún lodo.
¡Fiebre! Si esto que tengo no es fiebre,
no sé cómo es que se tiene fiebre y se siente.
El hecho esencial es que estoy convaleciente.
Esta carrera, amigos, está libre.
Veo la noche. Tocó ya la primera
corneta para vestirse e ir a cenar
¡Vida social como meta! ¡Eso, andar
hasta que la gente salga cogida del cuello!
Porque esto acaba mal y ha de haber,
¡ah!, sangre y un revólver para el fin
de este desasosiego que hay en mí
y que no hay otra forma de resolver.
Quien me mire me encontrará banal,
a mi vida y a mí... ¡Anda! un muchacho...
mi propio monóculo ya me ha hecho
pertenecer a un tipo universal.
¡Ah, cuánta alma habrá, que ande metida
así cual yo en lo Recto, y como yo sea mística!
¿Cuántos con la chaqueta característica
no tendrán, como yo, horror a la vida?
¡Si al menos fuese por fuera tan
interesante como lo soy por dentro!
Voy en el Maelstrom, cada vez más al centro.
y no hacer nada es mi perdición.
Un inútil. ¡Pero es tan justo serlo!
¡Si se pudiera despreciar a los otros
y, todavía, con los con los codos rotos,
ser un héroe, loco, maldito o bello!
Me asaltan ganas de acercar las manos
a la boca y morder a fondo haciéndome daño.
sería una ocupación original
y distraería a los otros, los tan sanos.
El absurdo, como flor de la India, como
no llegué a encontrar en la India, nace
en mi cerebro harto de cansarse.
Dios cambie mi vida o la vuelva letal.
Déjenme estar aquí, en esta silla
hasta que vengan a meterme en el cajón.
Nací para mandarín de condición,
pero me falta sosiego, suelo y esterilla.
¡Ah, qué bueno sería ir de aquí en caída
hacia la tumba por una trampa de estruendo!
La vida me sabe a tabaco rubio.
Nunca hice más que pasar la vida fumando.
Y al final lo que quiero es fe, es calma,
y no tener esas sensaciones confusas.
¡Que Dios acabe con esto! Abra las esclusas
y ¡basta de comedias en mi alma!

Monday, February 23, 2009

Es extraño cómo pasa todo

Cierra la puerta. Coge tu abrigo y cuélgalo. Guarda las llaves dentro del bolso y dámelo.

Fúmate un cigarrillo recostada en el sofá, y dame una nueva oportunidad.

¿Quieres un trago? Pareces cansada... La casa es un lío, no tengo tiempo para ordenar.

Tienes que ver qué gracia tengo con el delantal, pelando patatas para guisar.

Es extraño cómo pasa todo. Me sorprendo hablando solo, diciendo tu nombre como si estuvieras aquí.

Si oculto tu ropa, me parece un robo. Si quito tus fotos, me parece poco. Me enfado contigo como si estuvieras aquí.

¿Cómo has estado? Cuéntame algo. ¿Cómo te va? ¿Sales con alguien? ¿Has encontrado la felicidad?

Recuerdo los domingos que solíamos pasar: pastitas para el té y nada más...

Como si estuvieras aquí. Es como si estuvieras aquí.

Tuesday, February 10, 2009

Tigre

Tigre, tigre, que te enciendes en luz
por los bosques de la noche,
¿qué mano inmortal, qué ojo
pudo idear tu terrible simetría?

¿En qué profundidades distantes,
en qué cielos ardió el fuego de tus ojos?

¿Con qué alas osó elevarse?

¿Qué mano osó tomar ese fuego?

¿Y qué hombro, y qué arte
pudo tejer la nervadura de tu corazón?

Y al comenzar los latidos de tu corazón,
¿qué mano terrible? ¿Qué terribles pies?
¿Qué martillo? ¿Qué cadena?
¿En qué horno se templó tu cerebro?
¿En qué yunque? ¿Qué tremendas garras
osaron sus mortales terrores dominar?

Cuando las estrellas arrojaron sus lanzas
y bañaron los cielos con sus lágrimas
¿sonrió al ver su obra?

¿Quien hizo al cordero fue quien te hizo?

Tigre, tigre, que te enciendes en luz
por los bosques de la noche
¿qué mano inmortal, qué ojo
osó idear tu terrible simetría?

Wednesday, January 28, 2009

Oscuridad visible

El hombre... es la primera luz, que no es más que oscuridad visible. Es el fin, porque es descubir con la vista que se ha nacido ciego...

Son eras sobre eras, y tiempos tras tiempos, y lo único que hay es andar sobre la circunferencia de un círculo que alberga la verdad en el punto del centro...

Todo este universo, con su Dios y su Diablo, con los hombres y las cosas que ellos ven, es un jeroglífico que quedará por descifrar eternamente.

Tuesday, January 27, 2009

Luz de un quinquet

Luz de un quinquet
9 pintas, 29 latidos, Gillespie,
madrugada, ganas de hablar.
La generación del 77 íbamos a cambiar el mundo en el fututo
pero los electrodomésticos siguen funcionando en el 2007,
como siempre…
Me pregunto:
Por qué un intermitente puede llevarme a la lágrima, de vasta emoción, por qué siento que me responde, cuando se ilumina su automática luz naranja, y que no estoy solo, que somos dos, objetos comunicándose, que la máquina pretende mi atención, sabiendo antes de que se ilumine sin embargo apenas un segundo antes que así será…
No lo entiendo:
Por qué ladra el borracho a los coches que pasan a su lado.
Es de noche.
Hace frío.
Mientras, la gente ahí afuera insiste, empujando sus pesadas rocas, hacia la pirámide.
En las paredes de mi casa se pudre la luz de ayer por la mañana.
Y yo sigo de pie junto a la ventana, sin tomar ninguna decisión.
Podría quedarme a vivir dentro de esta canción.
A night in Tunisia.
Pienso que:
La oportunidad debe ir acompañada de destreza…
Todos los muebles de casa me observan con rostro de preocupación.
No quiero pensar,
para no atraer su atención, con el ruido de mi cabeza.
Un automóvil ha atropellado al borracho, se apagó el ruido y la furia.
Está muerto, pero no siento lástima.
Tampoco sé qué significa eso realmente, si es salvaje, inhumano o inmoral,
pero es cierto.
Y mientras, la gente ahí afuera no deja de insistir, empujando sus rocas.
Me pregunto:
Debe haber algún motivo por el que todo haya adquirido esta forma,
esta forma de costumbre, en que amanece como una herida sin importancia.
Ya no recuerdo qué clase de paciencia me trajo a este lugar...

Thursday, January 08, 2009

Límite

La mujer se ha perfeccionado.
Su cuerpo
muerto luce la sonrisa del acabamiento.
La ilusión de un anhelo griego
fluye por las volutas de su toga.
Sus pies
descalzos parecen decir:
Hasta aquí hemos llegado, se acabó.
Cada niño muerto, enroscado en sí,
una serpiente blanca, uno a cada lado de
su jarrita de leche, ya vacía.
Ella los ha plegado
de nuevo hacia su cuerpo, como se cierran
los pétalos de una rosa cuando el jardín
se despereza y los aromas sangran
de las dulces y profundas gargantas de la flor de la noche.
La luna no tiene por qué entristecerse.
Está acostumbrada a ver este tipo de cosas,
oculta bajo su capuchón de hueso,
arrastrando sus vestiduras negras y crepitantes.

Wednesday, January 07, 2009

Qué hago aquí

Qué hago aquí
escribiendo cosas que ya fueron escritas
contando cosas que ya fueron contadas
por gente más idónea
por gente más capaz
diciendo de otra forma lo que otros ya dijeron
en sánscrito
en latín
en chino
en árabe
a lo sumo cambiando
el orden
los lugares
las fechas
las palabras
pero no lo esencial
(lo esencial ya fue dicho)

Qué hago aquí
contando cosas que ya fueron contadas
escribiendo cosas que ya fueron escritas
por creadores sabidos o anónimos
en cuartillas
en papiros
en códices
en pergaminos
grabadas en piedra
de viva voz
recitadas
cantadas
repetidas
vueltas a repetir
versiones de versiones de lo mismo

Qué hago aquí
plagiando a autores que nunca he leído
(¿a quiénes estaré plagiando ahora?)

Qué hago aquí
si ya no queda nada que añadir
si todo lo decible ya fue dicho

Qué hago aquí
sin crear nada que antes no existiera
(pero ¿es factible?, ¿se puede acaso?)

Qué hago aquí
sin hacer nada nuevo

Qué hago aquí
repitiéndolo todo

Qué hago aquí

Friday, January 02, 2009

Heráclito

El segundo crepúsculo.
La noche que se ahonda en el sueño.
La purificación y el olvido.
El primer crepúsculo.
La mañana que ha sido el alba.
El día que fue la mañana.
El día numeroso que será la tarde gastada.
El segundo crepúsculo.
Ese otro hábito del tiempo, la noche.
La purificación y el olvido.
El primer crepúsculo.
El alba sigilosa y en el alba
la zozobra del griego.
¿Qué trama es ésta
del será, del es y del fue?
¿Qué río es éste por el cual corre el Ganges?
¿Qué río es éste cuya fuente es inconcebible?
¿Qué río es éste
que arrastra mitologías y espadas?
Es inútil que duerma.
Corre en el sueño, en el desierto, en un sótano.
El río me arrebata y soy ese río.
De una materia deleznable fui hecho, de misterioso tiempo.
Acaso el manantial está en mí.
Acaso de mi sombra surgen,
fatales e ilusorios, los días.